Hace un año, nos propusimos dedicar el 2018 a restructurar y consolidar nuestra asociación. Y es algo que hemos conseguido. Ahora, a inicios de 2019, podemos decir que vamos por buen camino.
El equipo directivo se ha reforzado con el cambio de presidencia y la entrada de nuevos miembros al consejo de administración, que cuentan con una reconocida experiencia en el ámbito penitenciario. Agradecemos a Alexandre Delavay por su apoyo incondicional desde el inicio de nuestras actividades.
Hoy en día, disponemos de las herramientas necesarias para realizar nuestros proyectos: un nuevo y más exhaustivo cuestionario, que permitirá recopilar una información más precisa con respecto a las políticas penitenciarias de cada país, y una herramienta de comparación mucho más eficaz. También contamos con una hoja de ruta y un plan estratégico de desarrollo. Por otra parte, nuestro equipo permanente se amplió en julio con la llegada de una persona encargada de recaudar fondos.
Es cierto que aún no tenemos mucho peso en la esfera internacional y que apenas estamos dando nuestros primeros pasos. Sin embargo, tenemos la increíble suerte de creer en nosotros mismos. Esta confianza nos la infunde la presencia de todos aquellos que nos apoyan a través de sus consejos, sus donativos, su implicación voluntaria, su trabajo y sus contribuciones financieras.