La población carcelaria en Senegal se ha duplicado en los últimos quince años. Este fenómeno se explica por varias razones: la aplicación excesiva de la prisión preventiva, una ley que criminaliza la posesión y venta cannabis, la falta de magistrados y el aumento de la población del país.

Las instalaciones carcelarias son vetustas y algunas presentan altos índices de sobrepoblación. El Gobierno ha anunciado la apertura de un nuevo establecimiento con una capacidad para 1500 personas, destinado a reemplazar la prisión de Rebeuss, la principal del país. Esta construcción se financiará en el marco de una coalición público-privada con el apoyo del Estado francés. La creación de la Escuela Nacional de Administración Penitenciaria (ENAP) también forma parte del proyecto.

En septiembre de 2016, en la prisión de Rebeuss, en Dakar, una huelga de hambre degeneró en una sublevación colectiva que se saldó con un muerto y diez heridos. Unos días más tarde, el Gobierno prohibió una manifestación organizada por las asociaciones defensoras de los derechos humanos.