< imagen © Valentin Lombardi.
Cada vez más mujeres y adolescentes son encarceladas en todo el mundo. Entre 2000 y 2020, la población carcelaria femenina aumentó en un 60 %, con respecto a un 22 % para la población masculina ─aunque globalmente sean minoritarias─. Este incremento se observa en particular en América Latina, Asia y Oceanía. La penalización de las mujeres cruza las fronteras y pone de manifiesto las profundas disparidades que existen en el trato judicial.
Las políticas de tolerancia cero en materia de delitos menores explican en gran parte este aumento. Por lo general, las mujeres en situaciones de precariedad, vulnerabilidad y violencia son las más afectadas, ya que a menudo terminan en prisión por delitos que cometen para hacer frente a sus dificultades económicas, asegurar su supervivencia y la de su familia, e incluso por comportamientos que se consideran inaceptables en razón de su género.
A los sistemas judiciales, pensados por mucho tiempo por y para los hombres, les cuesta tomar en consideración otras circunstancias diferentes a las suyas, y aplican sanciones sin importarles la realidad de las mujeres y el papel que juegan dentro de su comunidad. ¿Cuál es la lógica punitiva actual? Y, ¿cómo se organiza la lucha para transformarla?
Prison Insider explora el funcionamiento de los sistemas, en los que las acciones de poca gravedad se convierten en motivos para inculpar y penalizar a cientos de miles de mujeres en todo el mundo. Este artículo presenta los relatos de varias asociaciones y colectivos que se esfuerzan por transformar los sistemas políticos y judiciales ineficaces.
─ Este artículo forma parte de la serie Una espiral sin salida y se ha realizado con el apoyo de Open Society Foundations, de la Agencia Francesa de Desarrollo y la Ciudad de Lyon.
La marginación económica puede obligar a las mujeres a buscar medios de subsistencia ilegales.
Los sistemas penales suelen poner en su mira a las personas más desfavorecidas de la sociedad.
La simple existencia de las mujeres puede constituir una infracción.
Las huellas de la colonización se traslucen en la sobrerrepresentación de mujeres autóctonas en prisión.
El sistema judicial no lucha contra los estereotipos de género, más bien todo lo contrario.
Las organizaciones se unen para luchar contra los sistemas de justicia ineficaces y discriminatorios.
Contribuciones
Prison Insider promueve un enfoque colaborativo de la información. El presente artículo reúne varios puntos de vista, sin pretender ser exhaustivo. Las siguientes personas contribuyeron a este trabajo:
Wenceslas Assouhou (Acción de los Cristianos para la Abolición de la Tortura, Côte d’Ivoire), Fatna el Bouih (Relais Prison Société, Marruecos), Claudia Cardona (Mujeres Libres, Colombia), Marine Fourié (Futur au Présent, Senegal), Ruth Gagnon (Sociedad Elizabeth Fry de Quebec, Canadá), Anne-Céline Genevois (Sociedad Elizabeth Fry de Quebec, Canadá), Kiné Gueye (Futur au Présent, Senegal), Paul Kouadio (Acción de los Cristianos para la Abolición de la Tortura, Côte d’Ivoire), Sabrina Mahtani (Women Beyond Walls), Ibrahima Niabaly (Futur au Présent, Senegal), Alejandra Ramos Lezama (Equis-Justicia para la Mujeres, México), Ashling Tobin (Irish Penal Reform Trust, Irlanda), Cyndy Wylde (investigadora de la Universidad de Ottawa, Canadá), Amaranta Viridiana (Equis-Justicia para la Mujeres, México).