El 24 de noviembre de 2014, Marruecos ratificó el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes (OPCAT), con el que se comprometió a implementar un Mecanismo Nacional de Prevención (MNP) contra la tortura antes del 24 de diciembre de 2015.
La designación del MNP sigue actualmente pendiente, y podría orientarse hacia el Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
El CNDH vela por la protección y la defensa de los derechos humanos y de las libertades en Marruecos. Este órgano visita los lugares de detención, recibe las quejas de malos tratos por parte de los reclusos y de las ONG, y controla los casos de violación de los derechos fundamentales. Existe un sistema de correo que permite contactar con el CNDH desde la prisión. La Delegación Interministerial de Derechos Humanos (DIDH) es la responsable de transmitir el contenido de los buzones al CNDH y al delegado general de prisiones.